La Inteligencia Artificial (IA) ha avanzado de manera impresionante en diversos sectores de la sociedad, llevando consigo un enorme potencial para transformar positivamente nuestras vidas. Sin embargo, el creciente desarrollo de las herramientas tecnológicas disponibles plantea una pregunta crucial: ¿cuál es el límite entre la inteligencia artificial y la ética?
En primer lugar, la IA puede ser desarrollada para tomar decisiones críticas en diversas áreas, como la salud, el transporte y la justicia. Sin embargo, su capacidad para actuar de manera autónoma también puede generar preocupaciones éticas. ¿Cuáles son las consecuencias cuando una máquina toma una decisión errónea que perjudica a un individuo o a una comunidad? En este sentido, es necesario implementar sólidos principios éticos en el desarrollo de la IA para asegurar que sus acciones estén guiadas por valores humanos fundamentales, como la justicia, la equidad y la transparencia.
Recientemente, un anuncio de Volkswagen suscitó esta inquietud. Utilizando la IA, la cantante Elis Regina, fallecida en 1982, es retratada conduciendo y cantando una canción junto a su hija, Maria Rita. En el anuncio, se muestra a Elis conduciendo una antigua Kombi e interpretando un dúo con su hija, quien está al volante del modelo más reciente del vehículo. El anuncio generó tantos interrogantes que el Conar (Consejo Nacional de Autorregulación Publicitaria) inició un proceso ético para investigar la campaña.
Según el Conar, el proceso se inició después de que los consumidores plantearan dudas sobre la ética de utilizar la inteligencia artificial para reproducir la imagen de una persona fallecida. El procedimiento también examinará si los herederos pueden autorizar el derecho de imagen de alguien que ya ha fallecido para una pieza creada mediante IA en escenas en las que nunca participaron en su vida y que son, en realidad, ficticias.
Para Vinicius Pereira dos Santos, profesor y coordinador del curso de maestría en Marketing Digital de la MUST University, esta tecnología no es exactamente nueva, pero la situación en la que se colocó la imagen en este comercial es lo que causó la controversia. «En 1991, por ejemplo, la cantante Natalie Cole grabó la canción ‘Unforgettable’, en la que la voz de su padre, Nat King Cole, fue remasterizada y mezclada con la suya para simular un dueto. Así que esto no es algo nuevo, pero en ese caso se utilizaron imágenes existentes. En el caso de Elis, la tecnología creó una imagen nueva y ficticia», señala.
Según el experto en marketing digital, la cuestión de la ética aplicada a la Inteligencia Artificial debe evaluarse caso por caso. Sugiere que un simple cambio en el comercial podría haber evitado la controversia. Por ejemplo, si Maria Rita estuviera conduciendo el vehículo nuevo y su madre fallecida estuviera en una antigua Kombi en una escena sepia, simulando un recuerdo, ¿a la gente le molestaría tanto? En ese caso, sería evidente que es una imagen mental. El problema es que muchas personas están utilizando la IA para crear imágenes irreales, lo que puede llevar a la alienación. Él cree que este es el principal problema.
En segundo lugar, la privacidad y la seguridad de los datos son desafíos éticos significativos que acompañan a la inteligencia artificial. A medida que la IA recopila, analiza y utiliza una gran cantidad de información personal, surge la preocupación sobre el uso adecuado de estos datos. Es fundamental establecer salvaguardas para proteger la privacidad de los usuarios y evitar el uso indebido o abusivo de su información.
Además, la inteligencia artificial también puede agravar las desigualdades sociales existentes. Si no se regula adecuadamente, la IA puede favorecer a ciertos grupos o reforzar prejuicios presentes en los datos utilizados para entrenar los algoritmos. La igualdad de oportunidades y la no discriminación deben ser consideradas cuidadosamente durante el desarrollo e implementación de la IA, para asegurar una sociedad más justa e inclusiva.
En conclusión, el límite entre la inteligencia artificial y la ética es un desafío complejo. La tecnología de la IA tiene el poder de revolucionar nuestras vidas para mejor, es un hecho, pero es esencial que los valores éticos y la consideración por el bienestar humano guíen su desarrollo y aplicación. Al establecer pautas claras y regulaciones apropiadas, podemos cosechar los beneficios de la IA de manera responsable y ética, evitando posibles problemas y asegurando un futuro más equitativo y humano, declara el profesor de la MUST University.
«Semana Jurídica – Inteligencia Artificial Aplicada al Derecho»
Del 7 al 9 de agosto, la MUST University llevará a cabo un evento especial en vivo titulado «Semana Jurídica – Inteligencia Artificial Aplicada al Derecho». El evento se realizará en el canal de YouTube de la institución y contará con ponentes que forman parte del cuerpo docente de la universidad, del programa de maestría en Estudios Jurídicos con énfasis en Derecho Internacional. Aquí está el programa:
– 7 de agosto / 20:00 – Prof. Dr. Anderson Benaglia – Conferencia: Legal Design y Visual Law: herramientas del presente y futuro jurídico
– 8 de agosto / 20:00 – Prof. Dr. Carlos Afonso Gonçalves – Conferencia: Juicio por Inteligencia Artificial
– 9 de agosto / 20:00 – Prof. Dr. Lincoln Zub Dutra – Conferencia: El Futuro del Trabajo y las Nuevas Perspectivas en las Relaciones Laborales
Se entregarán certificados a estudiantes y ponentes.